Luego de la intensa campaña que se llevó a cabo hace un par de semanas en EE.UU., Donde Donald Trump quedó como nuevo presidente, las cosas se han ido normalizando. Es por ello que varias empresas tecnológicas se han acercado al electo presidente para intentar tenderle una mano.
El CEO de Apple, Tim Cook, se habría comunicado con Trump para esclarecer las intenciones de este, en las que pretende que la compañía fabrique sus dispositivos exclusivamente en EE.UU.
Trump comento al The New York Times (TNYT), que recibió la llamada del directivo de Apple días atrás, al cual le insistió la idea de que Apple dedique parte de su producción a nivel local, en vez de dejarla toda en Asia.
Durante la campaña electoral, Trump había prometido que una de sus primeras acciones, de ganar la presidencia, sería obligar a fabricar en EE.UU a las empresas que se aprovechan de la mano de obra barata en países del sudeste asiático.
El TNYT ha destacado que surgen los rumores que apuntan a que la gigante de Cupertino estaría planteándose la posibilidad que dos de sus dos ensambladoras más importantes, Foxconn y Pegatron, comiencen a fabricar sus componentes en Norteamérica, todo esto a pesar que sus costos sufrirían un importante incremento.
Cuando la victoria de Trump fue concluyente, Cook presentó una carta a sus empleados, en la que señalaba que ocurriera lo que ocurriera con las nuevas leyes y exigencias del gobierno, seguirían trabajando para ofrecer sus productos a todo el mundo.