Darwin es un robot humanoide creado por Investigadores del Instituto de Tecnología de Georgia, es usado en algunas clínicas y en lugares que ayuda a los niños con discapacidad de parálisis cerebral. Buscando solucionar algunos problemas relacionados con el autismo o recuperación de lesiones traumáticas cerebrales; ayudándoles a aumentar la actividad física de una manera motivadora y fácil aprendizaje, permitiéndole la coordinación muscular.
El robot se encarga de participar y revisar los ejercicios que se realicen de manera correcta y a su vez animando a los niños con comentarios motivados y correctos. Darwin cuenta con sensores que puede monitorizar en 3D los movimientos que hacen los niños, ya que puede verificar si se están haciendo correctamente utilizando el lenguaje propio de los niños, con la intención de no generar frustraciones.
El objetivo es que niños con discapacidades de parálisis, autismo y con alguna lesión cerebral se beneficien con esta ayuda que los investigadores están haciendo para que puedan coordinar sus movimientos. Y así corregir a los que lo están haciendo erróneamente. Actualmente hay pocos robots, ya que se está haciendo la prueba piloto y así después sacarlos al mercado.